Nos gusta leer en 1 Reyes 18 cómo el profeta Elías se enfrentó a los sacerdotes de Baal y pidió a Dios que enviara fuego del cielo. Hermano, hermana: el fuego no cae por sí solo en un lugar en medio del desierto, sino en el altar. Debemos preparar el altar de nuestras vidas si deseamos estar listos para que el fuego de Dios caiga sobre nosotros. Antes de que el fuego cayera para Elías, él soportó un arduo proceso de preparación. Y ¿para qué lo estaba preparando Dios a él? ¡Para cambiar en un día la religión de toda una nación! La tarea de Elías era sacar a los judíos de la adoración pagana de Baal y hacerlos volver a su fe en un solo Dios, Jehová el Señor. En 1 Reyes 17:1 leemos: Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad, dijo a Acab [el rey]: “Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra”. Inmediatamente se inició una sequía en todo Israel, y vino palabra de Dios a Elías: Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el arroyo de Querit, que está frente el Jordán. Beberás del arroyo; y yo he mandado a los cuervos que te den allí de comer (1 Reyes 17:3,4). Dios estaba diciendo: “Estoy preparando algo. Estoy preparando a la nación con esta sequía, los voy a quebrantar”. ¿Por qué Dios eligió una sequía para quebrar la obstinación de su gente? ¿Por qué no un terremoto o algún otro método? Quizá fue porque Baal era el dios de la lluvia, las cosechas, la prosperidad y la productividad. Con una sequía, él atacaría fuertemente a Baal. Dios parecía decir: “¿Qué clase de dios adoran ustedes si no llueve? ¿Qué clase de dios de la abundancia y la prosperidad es éste, si todos los campos están secos?” Dios preparaba a la nación al enviarle una sequía. Asegúrate de no maldecir tu sequía, porque algunas veces los tiempos secos son de Dios. Muchas veces El permite dificultades en nuestras familias, iglesias, ciudades y naciones para prepararnos y provocarnos hambre por un avivamiento. Cuando las cosas no funcionan normalmente, cuando hay aflicción, es común que la gente esté más dispuesta a volverse al Señor en busca de solución. AQUÍ UNOS PASOS EN EL PROCESO DE PREPARACIÓN. ¿Cómo preparó Dios a Elías para convertirlo en el líder de un gran avivamiento en Israel? Primero que nada, le dijo que se ocultara. También le dijo que bebiera del arroyo de Querit y que comiera del alimento que le trajeran los cuervos por la mañana y por la tarde.       Paso 1:Debemos aprender a depender de Dios (aunque sus métodos puedan ser extraños). Paso 2: Debemos estar dispuestos a cambiar. Paso 3: Ve a los lugares que Dios te diga. Paso 4: Debemos estar dispuestos a depender de otros. Paso 5: Debemos estar dispuestos a humillarnos y pedir. Paso 6: Lucha contra la desesperación y usa tu autoridad para los milagros. Paso 7:Rechaza la auto conmiseración y el fatalismo.

                                                        Sergio Scataglini

            CONTINUARÁ PRÓXIMA SEMANA.        

TOMADO DEL LIBRO: EL FUEGO DE SU SANTIDAD