En la Gran Comisión el Señor Jesucristo les da a sus discípulos una instrucción directa, “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mt 28:19); podríamos argumentar que esta instrucción fue dada sólo a sus discípulos y que nosotros como iglesia ya no somos los encargados de llevar a cabo esta tarea. Podríamos pensar que, de entre los diferentes ministerios que menciona el apóstol Pablo, esta tarea les corresponde realizarla a los Evangelistas, Pastores, Maestros, etc., y no a nosotros como miembros de una iglesia. Está por terminarse el 2013 y quizá algunos de nosotros nos pusimos como meta de año nuevo el compartir de Cristo a nuestros seres queridos que no lo conocen, pero no lo hicimos porque seguimos pensando que en realidad no es nuestra responsabilidad.
Sin embargo cuando leemos los siguientes versículos nos damos cuenta que Jesucristo, en los aproximadamente 33 años que estuvo en la tierra, se la paso compartiendo las buenas nuevas del reino: “Y subió al monte, llamó a los que El quiso, y ellos vinieron a Él. Y designó a doce, para que estuvieran con Él y para enviarlos a predicar” (Mr 3:13-14). Aquí observamos que los que estaban más cerca de Él tenían la misma tarea, predicar las buenas nuevas. El método de Jesús era muy práctico, que tú y yo seamos testigos de Cristo en todo nuestro ámbito de influencia, Familia, trabajo, escuela, vecinos etc.
Imagina la posibilidad de que en aquel día que lleguemos ante la presencia de Dios y entremos al reino de los cielos haya personas que no entren y sean enviadas a pasar el resto de la eternidad separadas de Dios por no haber recibido a Jesucristo en su corazón, imagina que pudieran reclamarte que por culpa tuya estarán fuera del propósito de Dios porque tú no les hablaste
“¿Porque no me hablaste de Cristo?” Es un drama que el departamento de evangelismo de nuestra iglesia está preparando para presentar el 22 de Diciembre a las 6:00 PM aquí en nuestra iglesia. Es un material que nos habla de lo que dice la Biblia referente a ese día, y queremos tu apoyo para que invites a tus seres queridos que no conocen a Cristo para que vengan y vean este drama; Dios nos ha estado moviendo a creer que esta es la ocasión en que muchos que no lo conocen podrán nacer de nuevo y asegurarse de pasar el resto de la eternidad al lado de Él. Por favor haz planes desde hoy y empieza a invitar a este evento a quienes el Señor está poniendo en tu mente y no desistas hasta que los veas sentados al lado tuyo en la iglesia, el Espíritu Santo hará el resto. Asegúrate de que en aquel día nadie de tus conocidos tenga que preguntarte
¿PORQUE NO ME HABLASTE DE CRISTO? Ahora por tu culpa me voy a perder eternamente; sí, por tu culpa!… No te lo puedes perder, te esperamos con TODOS tus invitados.
Nora y Frank Oviedo.