“No tengan miedo. Les traigo una buena noticia que los dejará muy contentos “.  Evangelio según   Lucas 2:10.

Ahora que se empiezan a respirar los helados vientos del norte, impidiéndonos hacer muchas cosas que en el verano hacíamos, a tomar más precauciones para no enfermarnos ni que se enfermen nuestros pequeños y adultos mayores; también comenzamos a sentir ese ambiente hermoso de la navidad, además que los comerciantes no pueden dejar de soñar en el incremento de sus ventas y a re planear en sus negocios, y los empleados tampoco pueden dejar de pensar en el momento intenso al recibir sus tan esperados aguinaldos. Las calles comienzan a lucir adornadas propia de la temporada, las familias discuten en las mesas, en auriculares y tanto medio tecnológico ahora sobre la cena de navidad, las visitas, etc. Para otras personas estas fiestas les traen profundas nostalgias porque ya no están con ellos algunos de sus seres  queridos. Pero en todo esto ¿ hay algo de bueno? Claro que sì!  En primer lugar, estamos recordando el nacimiento de nuestros Señor y Salvador como hombre, y esto siempre será motivo de gozo; segundo, es una excelente oportunidad de hablar de él, de su amor, de su sacrificio, resurrección y pronto retorno; tercero, es una gran oportunidad para reunirnos como familia, incluyendo a quienes tenemos en otras localidades.

Por tanto, las palabras del ángel a los pastores en la Biblia, nos recuerda, que en esta navidad, en estos tiempos,  no debemos tener miedo porque hay buenas noticias que nos pondrán muy contentos. ¿Cuàles son estas noticias? Pues que ha nacido el Salvador en Belén, como humanos, pero la mejor noticia para muchos de nosotros es que ha nacido en nuestros corazones, y la mejor noticia para los que aún están sin salvación, sin el perdón de sus pecados, sin la presencia de Dios, es que hoy, en esta navidad pueden ser perdonados, pueden ser salvados, pueden ser consolados y puede nacer Jesús en su corazón espiritualmente.

Pbro. Lorenzo Reséndiz Arvizu