En el punto de revelación – o inspiración divina- donde Dios nos habla a todos. El dijo: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis”. Jeremías 29:11. El Señor conoce el fin desde el principio y todo lo que hay entremedias. Y esas son las cosas que quiere revelarte. El libro de Job dice que eso es lo que Dios realmente hace; abre la mente del hombre y habla pensamientos inspiracionales a fin de poder evitar que el hombre siga su propio camino limitado. Los pensamientos de Dios son de abundancia y no de carencia, quiere que vivas mucho tiempo y quiere llevarte a una buena vida, te da pensamientos de inspiración y la capacidad de hacerlos existir con tus palabras a fin de que lleguemos a cumplir el mejor plan que tiene para nuestra vida. Él quiere que maduremos en sabiduría, autoridad y capacidad sobrenatural a fin de que podamos dar testimonio del esplendor de su Reino. Tu milagro ya están en existencia, pero te corresponde aprender a verlo y a llamarlo, pidámosle al Espíritu Santo que nos guíe en las palabras, pensamientos y fe, a medida que caminamos en nuestro día, siempre empezar en cada mañana y decir que es un nuevo día que Dios nos da y que es diferente al del día anterior puesto que su Palabra dice que “nuevas son cada mañana sus misericordias” pero sabemos que son en Él, ya que nos ha dado un nuevo día agradezcamos a Dios por toda situación que estemos pasando sea cualesquier forma en que estemos, seamos agradecidos con el Señor, porque es nuestro Dios y es poderoso para ayudarnos, de eso no hay ninguna duda, que nos da cada día las estrategias en que vivimos para el caminar de nuestra vida, que sea de acuerdo a su voluntad, ya que Él desea lo mejor para nuestra vida, así que caminemos en esa fe, en ese amor, en esa confianza, en esa esperanza, que su buen Espíritu nos guíe por un terreno donde sabemos que es su perfecta voluntad, y Él cesará todo tropiezo, en nuestras vidas…
Josefina Pecina Hernández