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La valentía de ser fuertes


2 Timoteo 2:1 “Tú pues, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús”.

Pasaje Bíblico: 2 Timoteo 2:1-7

“Tú, pues, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús. Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros. Tú, pues, sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo. Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado. Y también el que lucha como atleta, no es coronado si no lucha legítimamente. El labrador, para participar de los frutos, debe trabajar primero. Considera lo que digo, y el Señor te dé entendimiento en todo.”

La Ansiedad se caracteriza por un gran énfasis en el buen estado físico y en la fortaleza, lo vemos diariamente en los medios promocionando un mejor bienestar para la persona en su aspecto físico, venta de vitaminas, gimnasios, dietas alimenticias, etc. Muchas personas se entrenan regularmente y procuran comer una dieta saludable. Si la fortaleza es una preocupación de mucha importancia, nuestra salud espiritual debe ser una preocupación mayor. Fortaleza espiritual para los creyentes es esencialmente una actitud de valor, e incluye virtudes tales como el valor de la convicción, el valor de ser inflexible en relación al pecado, el valor de confrontar el error y la falsa doctrina, el valor de confrontar la intimidación y la persecución y aún así permanecer comprometidos con lo que es correcto.

Esta carta, como la conocemos, fue escrita por Pablo a Timoteo alrededor del año 67 d. de J.C. Pablo llamaba a Timoteo su “hijo en la fe”. Timoteo se convirtió en la ciudad de Listra, en Asia Menor, durante el primer viaje misionero de Pablo. Timoteo fue un joven, hijo de padre griego y madre hebrea, se había convertido en el ministerio de Pablo. Más tarde se convirtió en su compañero en los viajes misioneros, hasta que llegó a ser pastor de la iglesia de Éfeso. En el tiempo de 2 Timoteo, Pablo había hecho su última defensa gloriosa por Cristo y Nerón pronto dio órdenes para su ejecución. Afortunadamente tenemos la carta de 2 Timoteo. En el segundo capítulo, que es largo, tenemos una buena descripción de la clase de cristianos que todos debemos ser.

¿Cómo es un cristiano? ¿Cómo DEBE SER un cristiano?

Un cristiano es maestro v.1

Esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros

“1Tú, pues, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús”

Pablo le pidió a Timoteo que se fortaleciera en la gracia del Señor.

Efesios 6: 10

“Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.”

-Un maestro debe estar creciendo en la Palabra de Dios mientras viva.

-Un maestro comparte la verdad con otros. Lo que uno escucha entre muchos testigos debe enseñarlo a otros. ¿Hemos pensado en “pasar” a otros los libros y las enseñanzas que nos ayudan a crecer?

De esta manera podemos multiplicar nuestro ministerio y el de otros. Piense en dos o tres maneras en que usted puede ayudar a “instruir a otros”. ( Parte 1).

Pbro. Rodolfo Torres Pérez