En alguna vez has probado pan recién horneado? ¡Qué delicioso es! ¿Verdad? Pero imagínese un pan que no haya sido influenciado por la levadura… Ese sería un pan triste y difícil de comer.
Cuando en la Biblia se habla de levadura, normalmente es simbólico de algo negativo. Por ejemplo, en Mateo 16 Cristo nos amonestó a guardarnos de la “levadura de los fariseos” que se refería a su doctrina falsa (versículo 6). Esa doctrina falsa era una INFLUENCIA negativa que operaba por medio de los fariseos. La palabra clave es “influencia”. Interesantemente, en Mateo 13:33 Cristo nos dice que EL REINO DE DIOS ES SEMEJANTE A LA LEVADURA con que se leuda la harina (la masa) en la preparación del pan. Obviamente, hay una cualidad positiva que tiene la levadura. Otra vez, esa cualidad es la INFLUENCIA – en este caso, la influencia positiva del Reino de Dios.
Si revisamos todos los ingredientes que usamos en la preparación del pan, la levadura no es el más grande en cantidad. Al contrario, se usa muy poca. Pero lo que la distingue es que ES EL ÚNICO INGREDIENTE QUE ESTÁ VIVO. Por causa de estar vivo, la levadura tiene la habilidad de tener una influencia sobre toda la masa, y la llena de AIRE. La levadura TRANSFORMA la masa para que el pan sea ligero y gustoso. El pan alimenta y da vida.
En Lucas 17:21 Cristo nos dijo, «…he aquí EL REINO DE DIOS ESTÁ ENTRE VOSOTROS.» Los creyentes verdaderos, los hijos de Dios, los miembros del Cuerpo de Cristo llevamos esa vida del Reino de Dios en nosotros. El Espíritu Santo vive en nosotros (1ª Corintios 3:16). En Lucas 11:20 Cristo reveló que cuando ministramos por el Espíritu a otras personas que estamos extendiendo el Reino de Dios. HEMOS SIDO ENVIADOS COMO LA LEVADURA DEL REINO DE DIOS EN ESTE MUNDO PARA PROVOCAR CAMBIOS QUE TRAEN TRANSFORMACIÓN.
Así como la levadura produce burbujas de aire en la masa, nosotros introducimos el aire del Espíritu Santo al mundo que nos rodea cada vez que hacemos las obras de Cristo. Cada vez :
A) que producimos buenas obras ayudando a nuestro prójimo (Mateo 5:14-15)
B) que nos comportamos con el fruto del Espíritu (Gálatas 5:22-23)
C) o que ministremos los dones del Espíritu Santo (Juan 14:12)
¡ESTAMOS INFLUENCIANDO A OTROS CON LA LEVADURA DEL REINO DE DIOS!
Cliff Bell